domingo, 31 de octubre de 2010

Josefina



Ni el trabajo ni el pan ni la libertad ni el futuro se regalan. Marcelino Camacho



Hay pocas cosas que me conmuevan más que la integridad y la firme decisión de ser lo que se es y lo que se quiere ser; y me admira la tozuda resistencia contra los ecos fatuos del poder. No estoy segura de que yo pudiera con ellos.

De las imágenes aparecidas a propósito de la muerte de Marcelino Camacho, esta es una perfecta declaración de principios: su mujer, un amigo, su ideología y la marquesina de un autobús. Es la escueta descripción de la vida de un hombre que a esas altura podía tener despacho, coche, cargo honorífico, lugar reservado y unas cuantas prebendas. Sin embargo, parece seguir obstinado en defender algo para todos y anhelar para sí solo lo necesario para vivir. No viene al caso si lo hizo bien o mal; solo hablo de la persistente convicción de que o nos salvamos todos o no se salva nadie, de la decisión tenaz de levantar la voz por los más débiles y de una manera de vivir convencidamente honrada y entregada.

Y con todo, las imágenes que me han emocionado son las de Josefina Samper, su mujer. Ella era quien tejía los famosos marcelinos, esos jerséis de lana gorda con cremallera y cuello alto que inventó porque él tenía la garganta delicada y en la cárcel siempre estaba con faringitis. Luego siguió tejiéndolos; y él siguió llevándolos toda la vida. También ella, con toda la dignidad de una mujer sin bótox ni peluquería. Murió su marido y supo que tenía que estar ahí, aguantando el tirón con entereza, como estuvo siempre. Se puso una chaqueta de lana y fue para allá, a agradecer a todo el mundo que fueran a despedirse. Para ser la persona más digna de todos los que pasaron no necesitaba ni trajes negros ni gesto alguno, le bastaba su vida entera. Luego se volvió a su casa.

PS: Eso ocurría un día antes de celebrarse el centenario del nacimiento de Miguel Hernández, otro ejemplo de dignidad y voluntad de pensar y decir, llorado por otra Josefina (Manresa), una mujer morena resuelta en lunas.

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